"¿Oxidado?"

El Cafecito de Hoy.

"¿Oxidado?"

El día de ayer estuve con mi esposa, mi bebe y unos amigos compartiendo en el parque. Para combatir las altas temperaturas de este momento nada mejor que un buen picnic. Estuve un rato pateando y corriendo con un balón de futbol. El tema es que hoy amanecí con dolor muscular en la espalda y cuello. ¿Vejes? No creo, se llama falta de practica.

Nosotros, los que dejamos atrás el practicar deporte normalmente, nos vamos sintiendo oxidados conforme pasa el tiempo. Siempre digo que volveré a correr: “El lunes próximo comienzo”. Ayer era lunes y eso no sucedió. Cada semana repito esa frase en mi cabeza. He pasado de correr siete kilómetros cada dos días a caminar seis cuadras y sentarme a respirar… (Sé que algunos se identificarán conmigo).

Lo mismo pasa con los sentimientos. Si dejamos de ponerlos en práctica se oxidan. Hay personas que cerraron su corazón por un mal episodio en el pasado y nunca más han vuelto a abrirlo a un nuevo amor por miedo a que suceda lo mismo. Hay quienes no han querido practicar el perdón y su corazón se ha vuelto más duro, pesado y lleno de amargura. Y otros, por el contrario, que darían lo que fuera por experimentar la felicidad nuevamente.

El corazón, como todo músculo, hay que ejercitarlo poniendo en práctica nuestros sentimientos. ¿Hay momentos de dolor? Sí, evidentemente, pero esto es parte del proceso que hará tu corazón más fuerte, sabio y resistente. Así podrás volver a amar, perdonar y ejercitar nuevamente tu corazón.

Tenemos que aprender a perdonar para ser perdonados, amar para ser amados, sobrellevar para que nos sobrelleven, querer para que nos quieran, buscar para que nos busquen y cuidar para que nos cuiden.

Los tiempos han cambiado y la corriente nos lleva a vivir una vida centrada en lo que podemos recibir pero no en lo que podemos dar. Sal al parque y ejercita tus sentimientos. ¿Quieres que te perdonen? Sal a perdonar. ¿Quieres que te amen? Sal a dar amor. Recuerda que lo mismo que siembras, eso cosecharás, (Gálatas 6:8). Una buena actitud puede dar un giro positivo a una situación negativa. ¡Sonríe, que es gratis!

¡Que tengas un día bendecido!

Nestor Ortega

www.Elcafecito.org