Buenos días!
El Cafecito de Hoy.
Hay lugares donde las palomas caminan juntas al lado de la gente, súper normal. Porque han crecido entre ellas y ya se han acostumbrado.
En cambio aquellas que crecen lejos de la gente, al acercarse alguien salen volando por temor. Las palomas de la ciudad ya están acostumbradas a la gente, al bullicio, los carros y todo lo demás. Están acostumbradas.
Muchas veces eso nos pasa a nosotros, nos acostumbramos. Nacemos y crecemos en un ambiente de individualismo, egoísmo y de lucha por nuestra propia superación. Algo que ya para nosotros es un sentimiento normal. Nos enseñaron a crecer y a acumular, a pensar primero en nosotros antes que en otra persona. A no confiar, a ser insensibles, a retener y no dar, a perdonar pero no olvidar.
Nos enseñaron a amar condicionalmente, a siempre que damos, esperar algo a cambio, a tener siempre la razón y en caso de que no, a no darlo a demostrar. En fin… estamos tan intoxicados con el humo de la ciudad que ya cualquier cosa es normal para nosotros.
Los tiempos son difíciles y a causa de la maldad el amor de muchos se ha enfriado. No permitas que tu corazón se acostumbre al frio de este tiempo. Mantenlo cálido, dulce, moldeable, humilde, amoroso, dispuesto a dar sin recibir nada a cambio.
No te acostumbres… despierta, aun estamos a tiempo.
Que tengas un día bendecido.
Nestor Ortega