El Cafecito de Hoy.
El pasado fin de
semana estuve participando en un concierto en el pueblo de pimentel, a unos 20
minutos de San Francisco.
Luego del evento estuvimos cenando en la casa de unos
amigos, en la cual había un gran terreno con caballos y demás animales.
Mientras
salía con mi celular a hacer una llamada, note que una gallina con un polluelo,
más o menos grandecito, intentaban subir a un árbol para irse a dormir. Vi que
la gallina subió rápidamente pero dejo al polluelo solo abajo y no hizo ni un solo
intento de ayudarlo a subir.
El pollito gritaba al intentar fallidamente subir
al árbol. Pensé… ¨Que madre más inconsciente¨. Pero me di cuenta que así como
el pequeño pájaro gritaba, así la madre le gritaba desde arriba como diciendo ¨Vamos,
no te rindas, tu puedes, si bajo a ayudarte nunca podrás hacerlo solo¨ entonces
entendí la situación.
La gallina estaba dejando que el pequeño polluelo se
abriera camino en la vida y que se hiciera fuerte en el intento. Lo mismo pasa
con nosotros y Dios. Muchas veces pensamos que nos ha dejado solos, porque
tenemos la idea del Dios genio, que sale de la lámpara a concedernos deseos. Dios
más bien es como un entrenador, que nos prepara, nos equipa y desde la esquina
nos dirige en nuestra lucha, pero nunca nos deja solo.
Dios quiere que nos
abramos camino en la vida y que nos hagamos fuertes en el intento.
Si estas pasando por un momento difícil recuerda
que Dios nunca te ha abandonado, solo esta desde arriba gritándote ¨No estas solo, yo estoy
contigo, no te rindas, no tengas miedo, ten fe, tu puedes¨
Que tengas un día
Bendecido.
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Nestor Ortega