miércoles, 21 de junio de 2017

“La señora y las bolsas”

El Cafecito de hoy
La señora y las bolsas

Hace unos días salía del gimnasio, como de costumbre en las ultimas semanas. Cuando regresaba, a recoger mi coche donde lo había estacionado, tuve que cambiar de ruta por una construcción que había cerrado el paso. Hacia un sol candente, la temperatura estaba en 38° y yo me quejaba puesto que el camino de regreso se había hecho mas largo.

De repente vi una señora muy mayor, llevaba en sus manos cuatro bolsas del supermercado. Se notaba agobiada y cansada por el peso, el sol y el calor. Lo pensé dos veces antes de preguntarle si quería que la ayudara, puesto que normalmente te dicen que no, pensando que les vas a robar.

Me acerque y pedí ayudarle, ella con cara de indecisión acepto. Pero al continuar caminando y luego de charlar un rato, se sintió en confianza y se agarro de mis brazos para sostenerse, ya que venia muy agotada. Al llegar al portal de su edificio me agradeció de mil maneras la amabilidad de ayudarle. – No todo el mundo se detiene a ayudar a un anciano hoy en día, me dijo.

Al ir de regreso a mi coche me sentía feliz y agradecido por tener esta oportunidad de servir a alguien en el momento en que mas lo necesitaba. Hoy en día la rapidez y las ocupaciones nos impiden mirar a nuestro alrededor y darnos cuenta de quienes nos necesitan.

Hoy en día nuestro corazón esta tan frio y seco que solo pensamos en nosotros mismos. (Mateo 24:12) A veces Dios cambia nuestros planes, cambia nuestra ruta para que llevarnos donde alguien que nos necesita, pero en vez de eso nos quejamos y protestamos.

Abre tus ojos, alguien cerca de ti te necesita. Hay mil maneras creativas de cómo hacerlo. Existen orfanatos, asilo de ancianos, cárceles, personas viviendo en la calle, hasta amigos cercanos que están pasando por situaciones difíciles.

Recuerda, lo que Dios nos da es para disfrutarlo, pero también para compartirlo con aquellos menos afortunados. Abre tus ojos a tu alrededor, tal vez tu puedes convertirte en el milagro de alguien.

¡Que tengas un día bendecido!
Nestor Ortega
http://bit.ly/2sP3iMO