El Cafecito de hoy
“Fiesta en el coche”
Hace unas semanas me dirigía al centro de la ciudad a una cita. Transitar por el centro en coche en horas de la mañana a veces se torna caótico. Me encontraba en un atasco cuando de repente vi una escena que me hizo reír mucho pero a la vez me preocupo lo suficiente para pensar en escribir un cafecito sobre ella.
Eran a penas las 11::00 de la mañana. Iban en el atasco dos chicos y dos chicas en un coche. Cantando, bailando y disfrutando el momento. Estaban detenidos detrás de un autobús. Ellos se reían, disfrutaban y la estaban pasando muy bien, tanto así que no se percataban de que el autobús estaba averiado y que tenia las luces intermitentes puestas. Todo el mundo avanzaba en el trafico menos ellos. Pero no se dieron cuenta hasta que llegue a su lado y les hice saber que tenían que salir detrás del autobús para poder seguir avanzando en el trafico.
En principio no me entendían y no hacían caso a mi advertencia. Luego de unos segundos, uno de ellos se percato de lo que le decía y entraron en si. Llevaban ahí parados más de diez minutos sin darse cuenta de que no irían a ninguna parte, puesto que el autobús estaba estropeado. Y a pesar de que tenia las luces intermitentes puestas ellos estaban tan entretenidos disfrutando y pasándola bien, que no se percataban de que todos avanzaban menos ellos. ¿Esta historia te suena de algo?
Hoy en día se nos enseña que debemos gozar el momento. La vida es una sola, así que voy a celebrar, alegrarme, voy a reír, voy a bailar, vivir mi vida, la la la la la la, como dice la canción del salmista Marc Anthony.
Y si bien en cierto que la vida es una sola y que hay que vivirla. No todo es celebración. Vivir la vida es esforzarse por cumplir con metas, luchar para avanzar en tus planes, cumplir tu propósito y entonces así tendrás una razón para celebrar. Festejar es la recompensa por el esfuerzo. Es la retribución por el trabajo realizado. No se trata de vivir el momento sin importarnos el futuro.
Hoy en día nuestra juventud sufre el síndrome del presente. Solo piensan en el hoy, en el momento. Sin preocuparse por el día de mañana, ya que él traerá también su propio afán. Pero llegara el momento donde se harán mayores, tendrán hijos y ahí sufrirán el síndrome del pasado. Estarán lamentándose el no haber sembrado nada durante su juventud y por lo tanto no habrán cosechado nada para ellos ni sus familias.
No digo que no celebres, no digo que no te diviertas, solo te digo que estar atrás de un autobús con muchas señales, avisando de que está parado, gente aconsejándote que detrás de el nunca llegaras a ningún lugar y tú de oídos sordos porque estás viviendo tu momento, no es un buen plan. Yo daría lo que fuera por volver a mi pasado y no cometer los mismos errores que incurrí cuando era más joven.
Hoy es lunes, día de nuevos retos, día de bajar un poco el volumen de la música y salir de detrás de este autobús que no nos permite avanzar ni mirar al frente. Hoy es día de hacer cambios en tu vida. ¿Te atreves? Si te encuentras atrapado detrás del autobús de la fiesta y quieres salir, pero no sabes como, escríbeme ElCafecitoDiario@gmail.com
¡Que tengas un día bendecido!
Néstor Ortega
https://bit.ly/2Mg02Vk
“Fiesta en el coche”
Hace unas semanas me dirigía al centro de la ciudad a una cita. Transitar por el centro en coche en horas de la mañana a veces se torna caótico. Me encontraba en un atasco cuando de repente vi una escena que me hizo reír mucho pero a la vez me preocupo lo suficiente para pensar en escribir un cafecito sobre ella.
Eran a penas las 11::00 de la mañana. Iban en el atasco dos chicos y dos chicas en un coche. Cantando, bailando y disfrutando el momento. Estaban detenidos detrás de un autobús. Ellos se reían, disfrutaban y la estaban pasando muy bien, tanto así que no se percataban de que el autobús estaba averiado y que tenia las luces intermitentes puestas. Todo el mundo avanzaba en el trafico menos ellos. Pero no se dieron cuenta hasta que llegue a su lado y les hice saber que tenían que salir detrás del autobús para poder seguir avanzando en el trafico.
En principio no me entendían y no hacían caso a mi advertencia. Luego de unos segundos, uno de ellos se percato de lo que le decía y entraron en si. Llevaban ahí parados más de diez minutos sin darse cuenta de que no irían a ninguna parte, puesto que el autobús estaba estropeado. Y a pesar de que tenia las luces intermitentes puestas ellos estaban tan entretenidos disfrutando y pasándola bien, que no se percataban de que todos avanzaban menos ellos. ¿Esta historia te suena de algo?
Hoy en día se nos enseña que debemos gozar el momento. La vida es una sola, así que voy a celebrar, alegrarme, voy a reír, voy a bailar, vivir mi vida, la la la la la la, como dice la canción del salmista Marc Anthony.
Y si bien en cierto que la vida es una sola y que hay que vivirla. No todo es celebración. Vivir la vida es esforzarse por cumplir con metas, luchar para avanzar en tus planes, cumplir tu propósito y entonces así tendrás una razón para celebrar. Festejar es la recompensa por el esfuerzo. Es la retribución por el trabajo realizado. No se trata de vivir el momento sin importarnos el futuro.
Hoy en día nuestra juventud sufre el síndrome del presente. Solo piensan en el hoy, en el momento. Sin preocuparse por el día de mañana, ya que él traerá también su propio afán. Pero llegara el momento donde se harán mayores, tendrán hijos y ahí sufrirán el síndrome del pasado. Estarán lamentándose el no haber sembrado nada durante su juventud y por lo tanto no habrán cosechado nada para ellos ni sus familias.
No digo que no celebres, no digo que no te diviertas, solo te digo que estar atrás de un autobús con muchas señales, avisando de que está parado, gente aconsejándote que detrás de el nunca llegaras a ningún lugar y tú de oídos sordos porque estás viviendo tu momento, no es un buen plan. Yo daría lo que fuera por volver a mi pasado y no cometer los mismos errores que incurrí cuando era más joven.
Hoy es lunes, día de nuevos retos, día de bajar un poco el volumen de la música y salir de detrás de este autobús que no nos permite avanzar ni mirar al frente. Hoy es día de hacer cambios en tu vida. ¿Te atreves? Si te encuentras atrapado detrás del autobús de la fiesta y quieres salir, pero no sabes como, escríbeme ElCafecitoDiario@gmail.com
¡Que tengas un día bendecido!
Néstor Ortega
https://bit.ly/2Mg02Vk
