Buenos días!
El Cafecito de hoy.
Para que tengas una idea, salgo de casa
a las 8:00 am y en la mayoría de los casos regreso ya a dormir, ósea, casi
nunca estoy en casa. Pero justamente hace unos meses vi por la puerta del patio
entrar a un pequeño ratoncito y se me perdió entre los muebles de la casa. Trate
de todas maneras de atraparlo pero fue en vano.
Así que como salgo temprano y
llego tarde siempre me acordaba al llegar a casa de comprar la trampa, pero a
esa hora ya todo estaba cerrado. Luego de un par de meses alcance a ver al pequeño
ratón, que ya estaba más grandecito y dije… tengo que comprar esa trampa hoy sábado
que estoy libre, pero como tenía mucho trabajo en casa dije; la comprare mañana. Preferí pasar una noche más con mi pequeño ratón.
Cuantas veces nos pasa esto a
diario, dejamos que situaciones pequeñas entren a nuestra vida y van creciendo
con el tiempo y decimos; necesito cambiar, pero hoy no, mañana. Y preferimos
tener una noche más con nuestro pequeño ratón.
Es tiempo de sacar de nuestra
vida esas pequeñas cosas que nos hacen daño antes de que crezcan y necesitemos más
que una pequeña trampa para liberarnos. Así como los pequeños ratones van
comiendo de a poco cosas en tu casa, así hay sentimientos que te van comiendo
el corazón sin darte cuenta.
Nosotros somos responsables del fruto de nuestras
acciones y de lidiar con sus consecuencias. Se libre hoy… “El alma del perezoso desea, pero no alcanza’; Mas el alma
de los diligentes será prosperada”. (Proverbios 13:4).
No dejes para mañana lo
que Dios quiere hacer hoy.
Que tengas un día bendecido.