Buenos días!
El Cafecito de Hoy.
Entra el novio a la boda muy cargado, por todo su cuerpo se pueden ver bolsos.
Cada
bolso lleva una etiqueta: culpa, ira, arrogancia, inseguridad...
Mientras espera de pie ante el altar, la audiencia oye lo que piensa:
“Por fin una mujer me ayudará a llevar todas mis cargas. Es tan fuerte, tan estable, tan …”
Mientras
continúan sus pensamientos, comienzan los de ella. Entra con un vestido
de boda, pero, como su novio, está cubierta de equipaje. Arrastra una
maleta con ruedas, de un hombro cuelgan bolsas de papel, lleva cuanto
pueda imaginar y cada cosa con su etiqueta.
Ella lleva sus bolsos personales: prejuicios, soledad, desilusiones. ¿Cuáles son sus expectativas? Escuchemos lo que piensa:
“Unos
pocos minutos y tendré mi hombre. Se acabaron las consejerías. No más
sesiones de grupo. Adiós desalientos y preocupaciones. Ya no los veré
más. Él me lo solucionará todo”.
Por fin están ante el altar,
perdidos en una montaña de equipaje. Sonríen durante la ceremonia, pero
cuando llega el momento de dar el beso, no pueden. ¿Cómo abrazas a otra
persona si tienes los brazos llenos de bolsas?
Vivimos la vida
con tantas cargas en nuestros hombros que no podemos disfrutar de la
vida con libertad. Es tiempo de que sueltes todas esas cargas que nunca
debiste llevar.
La biblia dice: “Vengan a mí los que estén
trabajados y cansados que yo les daré descanso” (Mateo 11:28) La
pregunta es: ¿De que estas cansado?
Es tiempo de soltar las cargas, es tiempo de vivir! #ViveFull
www.ElCafecito.org
www.Twitter.com/ElCafecitoweb
Nestor Ortega