“La Cena de Navidad”

El Cafecito de hoy.

“La Cena de Navidad”

El pasado 24 de diciembre me propuse hacer una pierna de cerdo al horno para la cena de navidad. Estaba un poco escéptico puesto que era mi primera vez y tenia miedo de que me fuera a quedar o muy cruda o muy carbonizada. Por eso compre la pierna tres día antes, la sazone y la guarde en el congelador.

El día de la cena la deje en el horno, a fuego lento, desde las ocho de la mañana hasta las cuatro de la tarde. El resultado, un sabor increíble y una carne que se desasía en tu boca. Con toda humildad fue el plato de la noche. ¿Pero que hubiese pasado si hubiese puesto en horas de la tarde la pierna al horno con gran cantidad de fuego para que estuviera rápido? A lo mejor estaría bien frita por fuera pero cruda por dentro. ¿La enseñanza que nos dejo la pierna? Procesos…

Hoy en día la tecnología nos ha enseñado el valor de la rapidez y lo instantáneo. Queremos alcanzar todo versión microondas. Sin esfuerzos, sin sacrificios sin respetar los procesos. La dedicación y el tiempo son la clave para cosechar luego de haber sembrado. Si quieres buenos frutos debes esperar el tiempo prudente levantándote cada mañana a luchar por tu familia y por tus sueños. Proceso significa tiempo de espera.  A lo mejor no estas viendo el resultado de tu sacrificio, pero si abres la puerta del horno veras que la pierna se esta cocinando, aunque sea a fuego lento…

Vive tus procesos, ellos te ayudaran a madurar y hacerte mas fuerte. Recuerda, nada que no cueste sacrificio valdrá la pena. El apóstol Pedro, antes era un pescador con problemas de carácter, pero después del proceso se convirtió en uno de los mas grandes predicadores.

Créeme, quien soy el día de hoy es solo el fruto de una vida llena de errores, tropiezos, pero también de muchas ganas de aprender cada día de ellos y levantarme cada mañana con mas animo que el día anterior. Espera tu tiempo, trabaja duro y se paciente, lleva a Dios como capitán de tu barco y pronto veras el fruto que has sembrado.

Todos tenemos ese día en que no tenemos deseos ni animo de hacer absolutamente nada. En el que nos sentimos frustrados y cansados. La solución es irse a la cama temprano para que ese día termine pronto. Lo que con mucho trabajo se adquiere, más se ama. En cambio lo que se adquiere sin sacrificio no se le presta el valor necesario.

Conviértete en el mejor padre, el mejor hijo, la mejor madre, el mejor empleado, el mejor empresario. No dejes que el pesimismo y la dejadez toquen a tu puerta. Levántate hoy y da lo mejor de ti. #ViveFull

¡Que tengas un día bendecido!

Nestor Ortega

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